Hola!
Ayer fuimos al Allgäu, los Alpes alemanes que nos quedan más cerca de Stuttgart. Salimos a las 6:30 de la mañana con las calles hasta arriba de nieve porque durante la noche cayó la mayor nevada en lo que llevamos de invierno. No estábamos seguros de si podrÃamos llegar a los Alpes, pero las ruedas invernales, lo bien hechas que están las carreteras y el tráfico que hay siempre y limpia el asfalto nos permitieron llegar, aunque eso sÃ, con una hora de retraso por los atascos.
Alquilamos las raquetas y a las 10 empezamos a andar por un valle que estaba repleto de nieve. Nos aseguramos bien que la ruta no presenta riesgo de aludes como decÃa nuestro libro. Nos lo confirman en el pueblo y toda la gente que nos encontramos por el camino. Eso sÃ, nos avisan que a medida que subamos nos espera más de un metro de nieve virgen.
La ruta es sencilla, un desnivel de unos 800m para llegar a la cima. No conseguimos llegar porque habÃa muchÃsima nieve, no se veÃan muchas señales y seguÃamos la huella de los skiadores madrugadores porque abrirla no formaba parte del plan. Al final esta huella nos dejó en una cabaña de unos paisanos bávaros, justo debajo de la cima (Nos quedamos a 50m). Estos paisanos eran los skiadores que habÃan abierto la huella, la cabaña la utilizan para vivir cuando pastorean. Ojito con la cabaña que tenÃa todas las comodidades necesarias. Muy muy majos, nos dieron conversación, nos invitaron a cerveza y a entrar un buen rato. Lo de encontrarse españoles en medio de la montaña con tanta nieve les causaba mucha curiosidad.
Como punto aún más gracioso, como bajaron delante nuestra skiando y se iban cruzando con gente que subÃa se ve que les decÃan que habÃa dos españoles bajando con raquetas porque cuando nos cruzábamos con los que subÃan nos saludaban en español! (Buenosss dÃasss señoresss, hastaaa la vissta). Incluso al llegar al pueblo dos ancianas que estaban al principio del camino nos saludaron en español. Fuimos la sensación del dÃa en ese pueblecillo por ahà perdido.
Total unas 5 horas y media disfrutando de unos paisajes de cuento.
Llegamos a la cabaña:
Aquà nuestros nuevos amigos:
A la vuelta paramos en unos baños termales cerca de Stuttgart (Hay muchos) y nos relajamos dos horitas en baños de 34 y 36º, algunos exteriores...y estábamos a -5º, todo nevadÃsimo...una gozada.